Prepara tu coche para una escapada
Llevas esperando la mejor ocasión para darte un respiro. Los estudios, el trabajo y la rutina diaria te tienen atrapado en un bucle de estrés del que estás deseando pegarle una patada y coger el coche. Hoy te ofreceremos un top de 10 consejos para preparar tu coche para una escapada.
Eso sí, antes de iniciar un trayecto largo, necesitarás hacer una revisión de todo el motor para asegurarte una travesía cómoda y segura. Pues ya no hace falta que esperes más. Recarga pilas porque, ¡nos vamos de excursión!
Comprueba la presión de los neumáticos
Las ruedas de los coches es de las partes más importantes que debes echar un vistazo antes de iniciar un viaje. Es necesario tomar precauciones para evitar sufrir un reventón y una conducción llena de riesgos. Podrás comprobar la presión de los neumáticos y el dibujo de las llantas, donde la normalidad ronda los 2 mm. Y si la presión no es la idónea, ajústala o cambia de rueda.¡Cuida tu coche para procurarle una larga vida!
Prueba el estado de las pastillas de freno
Los frenos son los dispositivos más inmediatos que nos ayudan a controlar el coche y mantener la seguridad vial. Por esta razón, pondrás especial cuidado en la revisión de su eficacia. Lo mismo harás con el acelerador y el embrague si dispone de cambio manual, responsables de su movimiento y manejo de velocidades.
Estos tres elementos los puedes comprobar con el simple tacto del pedal, viendo si resulta más duro de lo normal o si pierden su capacidad (inclinación del coche aunque tengas el pie en el freno, coche circulando por debajo de la mínima…). En esos casos, debes acudir inmediatamente al taller antes de iniciar cualquier trayecto.
Observa el nivel de los líquidos
Los líquidos del coche como el aceite y el carburante resultan esenciales para el funcionamiento del motor y de toda la cadena que lo acompaña. Para comprobar sus niveles, basta con echar un vistazo a los sensores que dispones en el kilometraje
Si se iluminan, significa que hace falta rellenarlos. Para repostar cuentas con gasolineras y en algunas ocasiones también pueden contar con aceite. Si éste último no lo tuvieran, tendrás que acudir al taller más próximo.
Realiza una limpieza al sistema de filtros de aire
Otro elemento que condiciona una buena condición es el estado del sistema de filtros de aire. Puede parecer algo secundario, pero, plantéate estas cuestiones: ¿Y si el conductor es alérgico? ¿Y si te me empañan los cristales? Ambos casos solo lo podrás solucionar activando este dispositivo. Asegúrate de mantener la limpieza en el interior e incide en esta parte para su correcta función. Es algo en lo que casi nunca se piensa cuando preparas tu coche para una escapada.
Comprueba el funcionamiento de las luces
El estado de los faros de las luces serán claves para mejorar tu visión en las carreteras. Ya no solo cuando oscurece, sino también para las temporadas con clima adverso, donde tendrás que recurrir a ellos en reiteradas ocasiones. Debes comprobar si todas las luces funcionan y no hay ninguna fundida, además de su correcta potencia. Su mala eficacia no solo te puede suponer un riesgo en la seguridad vial, ¡también te pueden poner multas!
¡No olvides el nivel de la batería!
Los conductores hacen hincapié en todos los componentes mencionados, pero la batería suele ser el más olvidado. Quizás se deba a que se esconde en el interior del motor y no se perciba a priori. Sin embargo, es la responsable de suministrar la electricidad para el correcto funcionamiento de todo el aparato.
Al igual que los aceites, su nivel se puede comprobar con los testigos del kilometraje, aunque también puedes percatarte de posibles fallos cuando arranca lento o miras su carcasa y la ves hinchada. Cuando ocurre esta situación, acude al taller y cambia la batería, ¡antes de que afecte a todo el coche! Y en lugar de preparar tu coche para una escapada tengas que prepararlo para el desguace.
Revisa la holgura de los cinturones de seguridad
Pasamos a la sección dedicada a la seguridad. Los cinturones de seguridad son claves para retenernos en nuestro asiento y no salir disparados hacia delante ante posibles frenazos. Para que se cumpla este propósito, debes revisar su holgura, especialmente si hace poco tuviste un accidente. Éste debe permanecer tenso cuando lo estiras bruscamente. En el momento en el que ves que sigue blando, sabes que ha perdido su eficacia y tienes que cambiarlo.
Examina el estado de los airbags
Al igual que el cinturón, cuando preparas tu coche para una escapada que debes observar el estado de los airbags antes de iniciar la marcha, y después de un incidente con mayor razón. La buena respuesta y el correcto hinchamiento de las bolsas te puede salvar la vida en el supuesto caso de que ocurra algo. Si ves que tarda en responder y están demasiado blandos, reconoces que necesita un cambio.
Dispón de elementos para emergencias
No olvides que en el maletero, en el compartimento del copiloto o dónde te resulte más cómodo y accesible debes disponer de los elementos de emergencias estrellas: un cambio de neumático, chaleco reflectante y triángulos de señalización de peligro. Ahora que vas a de excursión, ¡haz una primera parada para equiparte de lo indispensable!
Mete el equipaje y ¡arranca motores!
¿Ya está todo en orden? Espera, ¡ para terminar de prepara tu coche para una escapada falta meter lo que te vayas a llevarte! Recuerda que el equipaje debe ir bien fijado en el maletero para evitar que choque con los ocupantes. No querrás empezar el viaje con chichones o incidentes. Mételo de manera que no te dificulte la visibilidad trasera. En el caso de que no puedas, podrás circular, pero tienes que tener ambos retrovisores laterales puestos y aumentar la observación. Cuando todo quede en su sitio, colócate en tu asiento, abróchate el cinturón y, ¡arranca motores!